2. Justificación e importancia del problema
El logro del aprendizaje está condicionado no sólo a factores de orden intelectual, sino que requiere como condición básica y necesaria una disposición o voluntad de aprender, sin la cual todo tipo de ayuda pedagógica estará condenada al fracaso.
Alonso Tapia (1991, p. 11) afirma que querer aprender y saber pensar son las condiciones personales básicas que permiten la adquisición de nuevos conocimientos y la aplicación de lo aprendido de forma efectiva cuando se necesita.
En esta voluntad de querer aprender surge la figura del papel clave que juega el docente como motivador del aprendizaje.
En los últimos años los docentes e investigadores educativos han centrado su atención en la búsqueda de estrategias que generen y mantengan el interés y gusto por aprender.
Se generan mejores experiencias de aprendizaje cuando la clase se diseña tomando en cuanto los intereses, necesidades, características generales y particulares de los alumnos.
El informe elaborado por la PREAL (Promoción de la Reforma Educativa en América Latina y el Caribe) denominado: “Informe de Progreso Educativo” concebido como un instrumento de diagnóstico y de formulación de recomendaciones; presenta una evaluación del rendimiento de los sistemas escolares a partir del análisis de indicadores tales como: resultados de los aprendizajes, niveles educativos de la población, niveles de equidad, descentralización, inversión en educación básica, profesión docente, estándares educativos y sistemas de evaluación.
En Panamá, de acuerdo con este informe, confrontamos deficiencias en el área de la Matemática, ubicándonos en la posición 8 con respecto a la eficiencia académica a nivel de América Latina.
Esta investigación pretende demostrar que el nivel de motivación en el discente es una variable que afecta el buen rendimiento académico del estudiante.
La motivación constituye una condición necesaria de la existencia propia del individuo y a su vez deviene en uno de los factores más importantes de su desarrollo, se puede considerar, el motor impulsor de toda su actividad.3
Hoy en día tenemos una nueva opción metodológica para el desarrollo de la enseñanza y apoyar a los estudiantes en el aspecto de la motivación y a los docentes en la estrategia de enseñanza-aprendizaje: la Educación Distribuida.
Los principios que apoyan el aprendizaje distribuido se enfocan en que el alumno se involucre de manera activa y que participe. En algunos casos, las necesidades de aprendizaje de los alumnos se pueden acomodar mejor a través de estrategias de aprendizaje distribuido que a través de interacciones cara a cara. El uso de una variedad de estrategias de aprendizaje es una de las mejores maneras de mantener el interés y de apoyar las necesidades de aprendizaje de los alumnos.